Logo
Imprimir esta página

La doble moral del occidente con relación a Israel

La doble moral del occidente con relación a Israel

¿En qué clase de mundo estamos viviendo, en el que los padres dicen con orgullo que sus hijos son asesinos?  ¿Qué tipo de líderes son esos que honran a quienes asesinan a otros?  Más aún, ¿cuál es la moral de los periodistas occidentales y grupos de “derechos humanos” que se enmudecen y no declaran su indignación ante el asesinato de una niña de 13 años mientras dormía en su casa? ¿Por qué nunca hablan de la depravación moral de la Autoridad Palestina?

Muchos permanecen en silencio, pero la gran mayoría se comporta aún peor: ¡Acusan a las víctimas de ser culpables de su propia muerte!  Mientras que otros justifican a los asesinos y encuentran excusas para defender a los terroristas.  Cuando los asesinatos tienen lugar en áreas bajo disputa, como Judea y Samaria, esos auto-identificados jueces, quienes clasifican a las víctimas como “colonizadores”,  alegan que merecían morir por estar donde no debían estar.  Justificándolos pasan por alto que la mayoría de los palestinos consideran a TODOS los judíos como “colonizadores” que están ocupando un territorio que no les pertenece, incluso hasta a los que asesinan en el propio Tel Aviv.

La explicación que ofrecen los periodistas occidentales es que la “violencia” se origina como resultado funesto de un “sentido de desesperanza” fomentado por el gobierno israelí.  Pero entonces, ¿por qué no dijeron lo mismo sobre los asesinatos ocurridos en los teatros de París, en el metro subterráneo en Londres, los rascacielos comerciales en Nueva York, el tren en Madrid o el restaurante en Dakha, Bangladesh? Si asesinan a judíos, es porque ellos mismos se lo buscan, pero si se trata de otros, ya la cosa es diferente.  ¿Por qué la doble moral? 
Ninguno de esos reporteros informa sobre las reacciones de las familias de esos asesinos.  Casi nadie comenta lo que hace la Autoridad Palestina luego de cada ataque por bomba, apuñalamiento, atropellamiento vehicular u otro medio, ni de cómo recompensa a los terroristas e instiga al resto de su población, para que cometan más asesinatos y más ataques.

La mayoría de los políticos occidentales no son diferentes, particularmente los europeos.   Sólo comentan los asesinatos a medias, y luego culpan al propio gobierno de Israel. Ninguno de ellos tampoco menciona las reacciones de las familias de los asesinos o la conducta de la Autoridad Palestina.  De esa manera, expresan su simpatía para la “causa palestina” sin tener que lidiar públicamente con las preguntas difíciles o con los hechos embarazosos.

Por ejemplo, la Autoridad Palestina no tan sólo honra a los asesinos, sino que produce nuevos criminales cada día, y lo hace a sabiendas y con toda premeditación.  Utiliza los libros escolares, la televisión, los programas radiales y los artículos periodísticos, para hacer su campaña y todo lo financia con dinero donado por los gobiernos occidentales.

¿Y por qué los políticos occidentales se mantienen mudos, mientras la Autoridad Palestina incita a los asesinatos y subvenciona el incitamiento para matar?  ¿Cómo pueden tener la doble moral de decir que se oponen al antisemitismo, pero a la vez apoyan una organización que incita a su gente a asesinar a los judíos?

¿Cómo pueden definir a una organización, como la Autoridad Palestina, de ser “moderada”,  mientras la misma envía a terroristas para que asesinen a israelíes y enseña a los niños por Facebook, acerca de cuál es la mejor manera de apuñalear a un judío a muerte? ¿Cómo pueden tan siquiera considerar que es urgente que se le otorgue nacionalidad a tal organización?

El 23 de junio del 2016, Mahmoud Abbás, presidente de la Autoridad Palestina, pronunció un discurso antisemita ante el Parlamento Europeo, acusando mentirosamente a los rabinos de instigar a los israelíes para que envenenen las aguas de los árabes palestinos. ¿Y saben qué pasó?  Que recibió la ovación y aplausos de casi todos los allí presentes.  Y luego al día siguiente, el 24 de junio, Abbás admitió que sus acusaciones eran falsas.

Unos pocos días después, el 1 de julio del 2016, el Cuarteto en favor del Medio Oriente: a saber la  Unión Europea, Estados Unidos, Rusia y las Naciones Unidas, presentaron un informe condenando la “violencia palestina”, pero aclarando que la causa principal de todos los problemas era la “colonización ilegal de los supuestos territorios palestinos”.

En el informe omitieron el hecho de que la “violencia de los palestinos” no respeta, sino que asesina a personas inocentes, tal como a la niña de 13 años muerta a puñaladas mientras dormía en su cama; que acribilló a una familia a tiros mientras cenaba en un centro comercial en Tel Aviv; que asesinó a un padre de familia mientras viajaba en su auto en compañía de sus hijos pequeños.   Pero la única culpa real de todas estas víctimas, fue ser judíos.

El informe del cuarteto omitió el hecho de que ellos mismos son quienes instigan tal genocidio, convirtiendo a millones de árabes en sus propios rifles genocidas.

Los creyentes debemos orar para que el Cuarteto Occidental reconozca y admita que la verdadera intención de los palestinos, es asesinar a TODOS los judíos y de arrebatarles sus tierras.  Oremos para que dejen de colaborar y financiar la violencia de estos homicidas.  “Cantad a Jehová, que habita en Sion; publicad entre los pueblos sus obras.  Porque el que demanda la sangre se acordó de ellos; no se olvidó del clamor de los afligidos” (Salmo 9:11–12).

Diseño © Radio América