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¿Es verdad que María necesitaba del perdón de Dios?

Ella misma admite, al decir que Él miró su bajeza.  Tal vez alguien diga: «Bueno, bajeza en el sentido que ella era humana, y Él Divino».  En ese caso, entonces vamos a otros textos.  Años después, el apóstol Pablo escribe a los romanos: “Como está escrito: No hay justo, ni aun uno; no hay quien entienda, no hay quien busque a Dios. Todos se desviaron, a una se hicieron inútiles; no hay quien haga lo bueno, no hay ni siquiera uno” (Ro. 3:10-12).  Pablo escribe esto y María seguramente todavía vivía, es muy probable y no le excluye a ella.

Naturalmente el Espíritu Santo inspiró a Pablo, pero uno podría decir que Pablo perdió la memoria… o no se acordaba que había una que no estaba en esta lista, “Todos se desviaron… no hay quien haga lo bueno, no hay ni siquiera uno” (Ro. 3:12).  Pero resulta que el Espíritu Santo no puede equivocarse, no pierde la memoria y Él inspiró a Pablo para que escribiera esto.

“Por tanto, como el pecado entró en el mundo por un hombre, y por el pecado la muerte, así la muerte pasó a todos los hombres, por cuanto TODOS pecaron” (Ro. 5:12).  María también murió, todos mueren y siguen muriendo.  ¿Por qué?  A causa del pecado, así como el pecado entró por un hombre, también por ese hombre entró la muerte, porque la consecuencia del pecado es la muerte y María no está excluida.

No la rechazamos, sino que la admiramos, porque vemos en ella una gran madre.  Crio varios hijos y tenía seguramente que soportar, no alabanzas ni adoración.  ¡No!  Ella soportó muchísimo, tal vez burlas y cosas por el estilo.  Porque… ¿cuántos podrían creer que ella de verdad, concibió del Espíritu Santo?  Esto tal vez cambió después en las mentes de muchas personas.  Pero en los primeros años, incluso en la infancia de Jesús no fue así.  El ministerio de Jesús recién comenzó a los treinta años.

Para ellos Él era un judío más y sólo eso.  Y era el primer hijo de una mujer llamada María, luego vinieron otros hijos que la Biblia incluso los menciona.  Así que, es verdad que ella era pecadora (Ro. 3:10-12; 5:12).

¿Es cierto que María tenía otros hijos aparte de Jesús?

También la Biblia nos contesta y no oculta nada.  Tal vez usted como no leyó la Biblia, ignora lo que la Palabra de Dios dice al respecto, es decir, de la familia de María.  No estamos hablando de sus padres, porque absolutamente nada de esto la Biblia menciona.  Si hay alguien por ahí diciendo… que cómo se llamaban sus padres, es algo inventado por la tradición Católica Romana, pero definitivamente NO aparece en la Biblia.

“Y despertando José del sueño, hizo como el ángel del Señor le había mandado, y recibió a su mujer.  Pero no la conoció hasta que dio a luz a su hijo primogénito; y le puso por nombre JESÚS” (Mt. 1:24, 25).  Dos palabras: “conocer”, que significa convivir, cohabitar, tener vida sexual entre esposos.  Y la otra palabra es “hasta… el hijo primogénito”.  Él (Jesús) era el primer hijo de María, no el ÚNICO.  UNIGÉNITO de Dios, PRIMOGÉNITO de María.  Pero este no es el único texto que habla acerca del tema.

“Mientras él aún hablaba a la gente, he aquí su madre y SUS HERMANOS estaban afuera, y le querían hablar” (Mt. 12:46).  ¿Hermanos de quién?… no de la madre, hermanos de Jesús.  Porque Jesús es el centro de todo este tema.

“Aconteció que cuando terminó Jesús estas parábolas, se fue de allí. Y venido a su tierra, les enseñaba en la sinagoga de ellos, de tal manera que se maravillaban, y decían: ¿De dónde tiene éste esta sabiduría y estos milagros? ¿No es éste el hijo del carpintero? ¿No se llama su madre María, y SUS HERMANOS, Jacobo, José, Simón y Judas?  ¿No están todas sus hermanas con nosotros? ¿De dónde, pues, tiene éste todas estas cosas? Y se escandalizaban de él. Pero Jesús les dijo: No hay profeta sin honra, sino en su propia tierra y en su casa (es decir su familia). Y no hizo allí muchos milagros, a causa de la incredulidad de ellos” (Mt. 13:53-58).  Aquí están los nombres de los cuatro varones que María tuvo con José, después que Jesús nació.  También dice “todas sus hermanas”, que debían ser por lo menos tres mujeres.

Algo más sobre la familia de José y María que menciona la Biblia, la cual solamente dice la verdad.  Lo que dice la tradición, o tal o cual creencia o religión, puede ser todo engaño o parcialmente engaño: “Después de estas cosas, andaba Jesús en Galilea; pues no quería andar en Judea, porque los judíos procuraban matarle. Estaba cerca la fiesta de los judíos, la de los tabernáculos; y le dijeron SUS HERMANOS: Sal de aquí, y vete a Judea, para que también tus discípulos vean las obras que haces. Porque ninguno que procura darse a conocer hace algo en secreto. Si estas cosas haces, manifiéstate al mundo. Porque ni aun SUS HERMANOS creían en él. Entonces Jesús les dijo: Mi tiempo aún no ha llegado, mas vuestro tiempo siempre está presto. No puede el mundo aborreceros a vosotros; mas a mí me aborrece, porque yo testifico de él, que sus obras son malas. Subid vosotros a la fiesta; yo no subo todavía a esa fiesta, porque mi tiempo aún no se ha cumplido. Y habiéndoles dicho esto, se quedó en Galilea.  Pero después que SUS HERMANOS habían subido, entonces él también subió a la fiesta, no abiertamente, sino como en secreto” (Jn. 7:1-10).  Una y otra vez, los escritores sagrados mencionan a la familia de José y María.

Si María tenía otros hijos, ¿por qué Juan, que no era su hijo tuvo que cuidar de ella, según palabras del mismo Jesús antes de su muerte?: “Cuando vio Jesús a su madre, y al discípulo a quien él amaba, que estaba presente, dijo a su madre: Mujer, he ahí tu hijo.  Después dijo al discípulo: He ahí tu madre. Y desde aquella hora el discípulo la recibió en su casa” (Jn. 19:26, 27). 

Jesús encomienda a Juan, que no era parte de la familia de José y María para que tome cuidado de María.  Se supone que José, el esposo de María ya había muerto.  Entonces alguien tenía que cuidarla, ahora que Jesús estaba por morir, clavado sobre una cruz.

La respuesta la tenemos en Juan 7:5, “Porque ni aun SUS HERMANOS creían en él”.

Puesto que sus hermanos, Jacobo, José, Simón y Judas no creían en Él, Jesús encomienda a que tome cuidado de María, su estimado discípulo llamado Juan.

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