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Ahora, que aun hay tiempo  - Esperanza para los que se han quedado atras - Para usted que se queda

Índice del artículo

Para usted que se queda

A esta altura de los acontecimientos y siendo que el Rapto ya había sucedido, Santiago volvió a formularse este interrogante: “¿Cuál debe ser mi actitud ahora?” Supo por las noticias que se había desencadenado una ola alarmante de suicidios en todo el mundo. Las itinerarias no daban abasto para recoger tantos cadáveres y los sepultureros vivían sus mejores días, ¡estaban muy ocupados!

Santiago recordó que su esposa tenía una serie de mensajes grabados de su pastor. Buscando se encontró con uno cuyo título le llamó la atención: “PARA USTED QUE SE QUEDA”.

El mensaje estaba basado en Juan 14:1-3 donde dice:

No se turbe vuestro corazón; creéis en Dios, creed también en mí. En la casa de mi Padre muchas moradas hay; si así no fuera, yo os lo hubiera dicho; voy, pues, a preparar lugar, para vosotros. Y si me fuere y os preparare lugar, vendré otra vez, y os tomaré a mí mismo, para que donde yo estoy, vosotros también estéis.
Juan 14:1-3

Escuchando atentamente el mensaje oyó que el pastor decía:

“Es raro que alguien predique sobre el arrebatamiento de la Iglesia tomando esta porción bíblica. Y esto se debe a que casi la totalidad de los pastores y predicadores cristianos no son judíos, sino gentiles. Jesús le habla en este caso a un puñado de judíos, conocedores de las costumbres matrimoniales en su pueblo. El protocolo de los casamientos que se celebran en nuestros días en todo cuanto pertenece al mundo civilizado incluyendo a los cristianos, es casi igual, salvo pequeñas diferencias”.

“Las normas son más o menos las siguientes: En primer lugar, el joven al enamorarse de una señorita solicita su consentimiento con fines matrimoniales. De llegarse a un acuerdo, existe lo que se llama el compromiso matrimonial y finalmente las bodas. Inmediatamente después de la ceremonia nupcial, los flamantes esposos se retiran para su “luna de miel”.

“A diferencia, entre los judíos las bodas seguían un procedimiento completamente distinto. Comenzaban con el enamoramiento recíproco entre los futuros esposos. Luego el joven debía dirigirse a su futuro suegro y hablarle de sus intenciones de tomar por esposa a su hija, llegando así a un acuerdo tras una breve ceremonia. En dicha ceremonia el joven entregaba a su suegro una cierta suma de dinero, que aunque no constituía la ‘compra’ de la esposa, simbólicamente era parte del ceremonial que finalmente los haría esposo y esposa. En esta ceremonia nupcial o mejor dicho ‘el pacto matrimonial’, además del dinero, había una copa que contenía vino. Era la copa del pacto matrimonial. En algo así como un brindis, el joven levantaba la copa y repetía estas palabras: ‘Se ha pagado el precio, se ha sellado el pacto, ella me pertenece”

“Hecha esta ceremonia, el joven se acercaba a la joven y le decía: ‘Querida, ya somos esposos, nos hemos desposado. Todo está hecho, porque ya se ha pagado el precio, se ha sellado el pacto, tú me perteneces. Ahora me voy a preparar el lugar donde viviremos. Mi regreso no depende de mí, sino primero del tiempo que me tome preparar nuestra morada y segundo de que mi padre me permita regresar. Tú, mientras tanto, debes estar vigilante. Puede que llegue a medianoche, al atardecer o por la mañana. Francamente no sé el momento exacto. Pero quiero que estés lista para que cuando llegue puedas partir conmigo al instante”.

El pastor continuó diciendo:

“Fíjense con cuántos detalles el Señor nos hace ver la realidad del arrebatamiento en estos tres versículos del capítulo 14 de Juan. El pagó el precio cuando murió en la cruz y derramó su sangre por nosotros. El se dio a sí mismo por usted y por mí. Además selló el pacto mediante el derramamiento de su sangre. Ese ‘pacto’ (testamento) es todo cuanto tenemos hoy en términos de promesas, en lo que conocemos como ‘El Nuevo Testamento de nuestro Señor Jesucristo’’’.

Mientras Santiago escuchaba esta grabación se preguntaba:

—¿Pero cómo es posible que siendo esto tan claro nunca le haya prestado la menor atención? —continuó escuchando y el pastor prosiguió:

“Hermanos, fíjense cuán hermosamente nuestro Señor nos hace ver los detalles de nuestra condición ante él y del mismo arrebatamiento y lo que viene después. Quiero que noten que cuando Jesús murió en la cruz y momentos antes exclamó: ‘Consumado es’, realmente en ese instante pagó el precio y selló el pacto de nuestra redención, mientras los redimidos de todos los tiempos van conformando su Iglesia, su flamante Esposa. No es correcto pretender que la Iglesia es la ‘novia’, porque cuando los judíos se desposaban, no se unían físicamente de inmediato. Primero el esposo iba a preparar el lugar en donde vivirían. Y en este momento el Señor está preparando ese lugar para nosotros. Ni bien lo haya terminado, Dios el Padre le dirá: ‘Hijo mío, anda y trae a tu Esposa para que esté contigo’. ¡Esa será la orden del Dios omnipotente y así sucederá el Rapto!”

Santiago detuvo la grabación y se acordó de un texto que no entendía bien, justo en relación al arrebatamiento, donde Jesús dice que el día y la hora nadie sabe, ni siquiera el mismo Hijo:

Pero de aquel día y de la hora nadie sabe, ni aun los ángeles que están en el cielo, ni el Hijo, sino el Padre.
Marcos 13:32

Santiago quedó asombrado de la exactitud de las palabras de Jesús y de todo lo relacionado con la costumbre matrimonial judía. El pastor prosiguió diciendo:

“La enseñanza de nuestro Señor abarca también otros aspectos relacionados con ese gran momento del arrebatamiento. Cuando el joven llevaba a su flamante esposa a su casa, se retiraban juntos a sus habitaciones a disfrutar de su intimidad. Al cabo de 7 días abandonaban el aposento y él orgullosamente le presentaba su esposa hermosamente ataviada a sus amigos. La Biblia nos dice que cuando la Iglesia haya sido retirada de este planeta, habrá un período de 7 años de gran tribulación, que se llama también ‘tiempos de angustia para Jacob’ (Jeremías 30:7)”.

El pastor siguió explicando que Daniel el profeta habla con detalles de esa “semana” de tribulación, que son 7 años. Durante esos horribles días de tribulación aquí en la tierra, los cristianos ya estarán en la presencia del Salvador, gozando de aquel maravilloso lugar que él personalmente les preparo. Pero cuando se cumplan los 7 días, es decir los 7 años, el Señor regresará a la tierra junto con su Iglesia y .acompañado de innumerables ángeles. ¡Qué espectáculo será ese! Y en efecto, a continuación Santiago escuchó la lectura del siguiente pasaje de la Biblia:

E inmediatamente después de la tribulación de aquellos días, el sol se oscurecerá, y la luna no dará su resplandor y las estrellas caerán del cielo, y las potencias de los cielos serán conmovidas. Entonces aparecerá la señal del Hijo del Hombre en el cielo; y entonces lamentarán todas las tribus de la tierra, y verán al Hijo del Hombre viniendo sobre la nubes del cielo, con poder y gran gloria. Y enviará sus ángeles con gran voz de trompeta, y juntarán a sus escogidos, de los cuatro vientos, desde un extremo del cielo hasta el otro.
Mateo 24:29-31

Leída esta porción bíblica, el pastor indicó: “Hay dos cosas que ocurrirán cuando nuestro Señor venga, pero es necesario además que se aclaren otros puntos que muchos cristianos confunden. “Primero, en el arrebatamiento el Señor NO llega a la tierra, porque atraerá a sí mismo a todos los suyos, el encuentro se producirá en el aire, en el espacio. Tal como ocurre cuando se acerca una tijera a una aguja. Debido al imán que tienen en común los dos instrumentos, la aguja es atraída por la tijera. Hay algo que los cristianos tenemos en común con nuestro Salvador. ¡Es el Espíritu Santo! Pablo se refirió a esto cuando dijo:

En él también vosotros, habiendo oído la palabra de verdad, el evangelio de vuestra salvación, y habiendo creído en él, fuisteis sellados con el Espíritu Santo de la promesa, que es las arras de nuestra herencia hasta la redención de la posesión adquirida, para alabanza de su gloria.
Efesios 13-14

“La palabra “arras” significa ‘garantía’. De modo que la garantía de que participaremos en el arrebatamiento, es el Espíritu Santo que todos los cristianos tenemos, porque Cristo nos lo concedió en el momento cuando, habiendo oído el Evangelio, arrepentidos creímos en él. “Si hay algo en común que tenemos con el Salvador, es lo que él mismo basado en su promesa (no a nuestro gemir y llorar, pedir y reclamar), nos ha dado cuando arrepentidos nos rendimos a él. Todos cuantos han tenido esta experiencia serán atraídos por él en el momento del Rapto por el imán del Espíritu Santo. Tal como lo aseguró él mismo:

Y yo, si fuere levantado de la tierra, a todos atraeré a mí mismo.
Juan 12:32

El pastor insistió en que no se confundiera el arrebatamiento de la Iglesia con la segunda venida del Señor. Pablo le dijo a los Tesalonicenses que el encuentro entre el Señor y la Iglesia se producirá “en el aire”. “Luego nosotros los que vivimos, los que hayamos quedado, seremos arrebatados juntamente con ellos en las nubes para recibir al Señor en el aire, y así estaremos siempre con el Señor” (1 Tesalonicenses 4:1 7).

El pastor aclaró que Jesús vendría como ladrón en la noche, porque el mundo, ni nadie lo vería. El arrebatamiento se produciría en cosa de fracción de segundos, “en un momento, en un abrir y cerrar de ojos, a la final trompeta; porque se tocará la trompeta, y los muertos serán resucitados incorruptibles, y nosotros seremos transformados” (1 Corintios 15:52).

Pero... ¿Qué se entiende por “un abrir y cerrar de ojos”? La luz viaja a 300.000 kilómetros por segundo y realiza el recorrido de ida y vuelta de la tierra a la luna en sólo 3 segundos, pero un abrir y cerrar de ojos es el tiempo que demora la luz en ir de la superficie del ojo a la retina del mismo. En un abrir y cerrar de ojos, esa luz que va de la tierra a la luna en 3 segundos, sólo habrá recorrido unos 45 centímetros de distancia del suelo ¡Qué rapidez la de Dios!

—Con razón —dijo Santiago— ¡Ni cuenta me di cuando toda mi familia desapareció! Y siguió diciendo el pastor:

“Los hombres piensan que han logrado grandes avances en lo que a velocidad se refiere, y ciertamente han progresado mucho, porque hoy ya se ha cumplido lo que Dios reservó para los días finales, el gran salto científico. Sin embargo, con toda la ciencia y tecnología tan sorprendente, Dios burlará en una fracción de segundo todo lo que han logrado tantos cerebros con tanto sacrificio. “Sí, mis amigos y hermanos —siguió diciendo el pastor— no confundamos el arrebatamiento con la segunda venida del Señor. También debemos recordar que cuando se produzca el arrebatamiento, los que murieron siendo fieles resucitarán dejando tras sí sus tumbas vacías”.

A esta altura Santiago detuvo la grabación, subió en su automóvil y partió rumbo al cementerio. Su propia madre había sido una cristiana fiel. —Veré si su cuerpo todavía está o no en la tumba —dijo—. Cuando llegó notó que no era el único que buscaba pruebas, varios otros también estaban allí. Todos comprobaban lo mismo. La tumba donde descansaban los restos de la madre de Santiago estaba abierta, no había un solo huesito en la fosa. ¡Santiago quedó asombrado de la exactitud con que la Biblia había predicho todo esto hasta en los últimos detalles! —No —se dijo—. Ya no necesito más pruebas. Conocí muy bien a mí madre. Recuerdo con cuánta ternura me hablaba una y otra vez del amor de Dios, del perdón que necesitaba. Sé que ella está con el Señor.

Recordó entonces parte de la letra de una canción que Miriam solía cantar en la iglesia para el día de la madre que decía:

“Los años de mi infancia me recuerdan con dolor, que a veces despreciaba de mi madre el dulce amor’

Luego el coro cantaba:

“Oh madre de mi amor, en gloria te veré”.

Entonces Santiago recordó que el autor de esta canción se dirigía a Jesús diciéndole:

“Dile oh Señor, que en gloria la veré”.

Y Santiago cayendo de rodillas junto a la tumba vacía de su madre dijo:

Señor Jesús, dile a mi madre que allí la veré. Entiendo que lo que me espera es serio, probablemente tenga que ser parte de los decapitados por causa de tu nombre. Ya no me cabe la menor duda de que todo lo que dice tu Palabra, se cumplirá. Señor, quítame el temor a la espada del anticristo. Dile, por favor, Señor a mi madre, que allá la veré. Amén”.

Santiago vio otras escenas parecidas en el mismo cementerio, pero habían otros que parecían levantar el puño contra Dios y contra Jesús. Como que estaban decididos a aliarse con el enemigo.

Al llegar a su casa cabizbajo y con un peso enorme en el corazón, Santiago una vez más tomó su Biblia y se dispuso a leer. Vino a su mente el capítulo 24 de Mateo que había sido citado por el pastor y algunos otros pasajes. El primero que leyó fue Zacarías en donde dice;

He aquí, el día de Jehová viene, y en medio de ti serán repartidos tus despojos. Porque yo reuniré a todas las naciones para combatir contra Jerusalén... Después saldrá Jehová y peleará con aquellas naciones, como peleó en el día de la batalla. Y se afirmarán sus pies en aquel día sobre el monte de los Olivos, que está en frente de Jerusalén al oriente; y el monte de los Olivos se partirá por en medio, hacia el oriente y hacia el occidente, haciendo un valle muy grande; y la mitad del monte se apartará hacia el norte, y la otra mitad hacia el sur... Y vendrá Jehová mi Dios, y con él todos los santos.
Zacarías 14:1-5

En la grabación el pastor explicaba que esto ocurriría cuando el Señor regresara para establecer su reino milenial, justo cuando todos los ejércitos del mundo rodearan a Jerusalén para el asalto final, lo que también sería el broche de la guerra del Armagedón. El pastor insistía en que no debía confundir-se el arrebatamiento de la Iglesia con la venida del Señor.

“En el arrebatamiento —decía—, nosotros nos vamos con él, pero en su venida regresaremos con él. En el arrebatamiento él nos rescatará del gobierno del anticristo, en su venida nos hará parte de su gobierno.

“Algunos, confundiendo los pasajes que hablan sobre el arrebatamiento y la Segunda Venida respectivamente, dicen que la Biblia se contradice, pero no hay tal. ‘¿Cómo es posible? —se preguntan—, ¿un arrebatamiento inadvertido cuando la Biblia dice que... todo ojo le verá, y que vendrá con poder y gran gloria?’ Efectivamente, los pasajes de la Biblia que hablan sobre esto NO se refieren al arrebatamiento, sino a su Segunda Venida, que tendrá lugar unos 7 años después del arrebatamiento.

“La Biblia dice que él ‘posará sus pies sobre el monte de los Olivos’. También declara que ‘vendrá con poder y gran gloria.’ (Mateo 24:30) y añade... ‘He aquí que viene con las nubes, y todo ojo le verá’  (Apocalipsis 1:7).

“Pero... ¿Cómo aplica a la venida del Señor la parte de las bodas del joven judío cuando éste presenta su flamante esposa a sus amigos? ¿Quiénes son esos amigos? La Biblia no lo especifica, pero es muy probable que sea el remanente de Israel que será salvo. Muchos pasajes bíblicos hablan de esta salvación final, cuando todos los judíos creerán en Jesús y lo recibirán como su Mesías.

“Son muchísimos los pasajes bíblicos, tanto en el Antiguo como en el Nuevo Testamento, que hablan sobre esta redención final y total, pero el que generalmente se cita es lo que Pablo dice en Romanos 11:25-36. Según el mismo Señor, llegará el momento cuando los judíos se convertirán todos al mismo tiempo, cuando le vean regresar, por eso les dijo:

Porque os digo que desde ahora no me veréis, hasta que digáis: Bendito el que viene en el nombre del Señor
Mateo 23:39

Santiago no pudo menos que concordar con el mensaje que escuchaba, pues ahora se adelantaba a las mismas noticias. Sabía que el anticristo ya estaba en pleno ejercicio de su poder. Escuchaba las noticias provenientes del Medio Oriente y muy especialmente de Europa. Lo que más llamaba su atención era que las ciudades que más se mencionaba en las noticias era Jerusalén y Roma.

Una vez más volvió a leer los capítulos 17 y 18 de Apocalipsis, los cuales indicaban que aunque tal parecía que el mando del gobierno mundial iba a caer en manos del jerarca del Vaticano, finalmente no sería así, porque en una reunión urgente de los gobernantes del Mercado Común Europeo, ellos decidirían entregar el poder a un individuo hasta entonces poco conocido. El aparecería en la televisión mundial con gran carisma, una atracción irresistible. Este individuo tendría fórmulas casi mágicas para resolver los peores problemas. Los comentarios de los diarios todos serían favorables. Incluso muchos dirían, especialmente los promotores de la Nueva Era, que el Mesías ya se encontraba entre nosotros y que la Nueva Era había llegado. Este individuo tendría respuestas aceptables, aplicables a todos los problemas graves. Santiago entonces se dijo:—¡Todo esto ya se ha cumplido!

Por último, en la grabación, el pastor llamaba la atención de todos, hizo una pausa como queriendo contener su emoción y se dispuso a ofrecer una lista de consejos para aquellos que se quedaran. Santiago se dispuso a escuchar esta parte con profunda turbación. Se daba cuenta que era para él. El pastor con voz firme dijo: “Hermanos y amigos, quiero que tomen nota de lo que les diré a continuación. Si alguno de ustedes es un cristiano falso, no salvo, o si es una persona que no forma parte de esta iglesia y sale de este lugar sin reconciliarse con Dios, tengo ciertos consejos que le servirán cuando los cristianos verdaderos ya no estemos aquí. Ustedes tienen mi número telefónico, pero si se produce el Rapto no me llamen, ya no estaré aquí, ni tampoco mi familia. No tengo animales en mi casa, porque los que tenía ya los entregué a familias que sé que no tienen interés alguno en el arrebatamiento, porque no les interesa la salvación. Ellos cuidarán de sus animales y de los míos también.

“A continuación les daré los pasos a seguir en caso de que usted se quede atrás cuando se produzca el arrebatamiento:

1. Por favor no se suicide. No cometa este error, porque de hacerlo estará definitivamente condenado en el infierno y finalmente en el lago de fuego. Recuerde lo que dice la Biblia:

Y de la manera que está establecido para los hombres que mueran una sola vez, y después de esto el juicio.
Hebreos 9:27

2. No se deje cautivar por las lindas palabras. No se deje cautivar por las lindas palabras que hablará el flamante gobernante. Tenga bien presente que el apóstol Pablo dice que Satanás, para engañar “se disfraza como ángel de luz” (2 Corintios 11:14).

3. Cuidado con la religión mundial. No participe en el gran programa que montará la religión mundial llamada la Nueva Era, integrada por todas las religiones del mundo, el plan de ellos es supuestamente invitar a Jesús para que venga a reinar, pero tenga bien presente que su verdadera intención será entronizar al anticristo, no a Cristo.

4. No se deje marcar por el anticristo, 666. No se deje imponer la marca, número o nombre del anticristo que en la Biblia se menciona como 666. No importa que hoy no sepamos bien cómo interpretar esa marca. Cuando llegue la hora, usted descubrirá que el significado del 666 es mucho más complicado de lo que parecía. No olvide que la Biblia dice que los que reciban la marca serán definitivamente condenados:

Y hacía que a todos, pequeños y grandes, ricos y pobres, libres y esclavos, se les pusiese una marca en la mano derecha, o en la frente; y que ninguno pudiese comprar ni vende; sino el que tuviese la marca o el nombre de la bestia, o el número de su nombre.
Apocalipsis 13:16-18

Y el tercer ángel los siguió, diciendo a gran voz: Si alguno adora a la bestia y a su imagen, y recibe la marca en su frente o en su mano, él también beberá del vino de la ira de Dios, que ha sido vaciado puro en el cáliz de su ira; y será atormentado con fuego y azufre delante de los santos ángeles y del Cordero.
Apocalipsis 14:9-11

5. No se entusiasme por la bonanza inicial. Es probable que pasados los primeros tres años y medio del gobierno de este hombre, los que podrían ser bastante buenos y de paz, alguien le mate, pero él resucitará. Cuando esto ocurra, la gran mayoría de quienes no le hayan reconocido como su “mesías” ahora serán engañados por el gran milagro de su resurrección. No se deje engañar, Dios permitirá tal cosa para que los incrédulos se decidan por el anticristo.

6. No se deje seducir por los milagros y prodigios. Habrá muchísimos milagros y prodigios. Sanidades divinas, manifestaciones de autoridad excepcional sobre supuestos espíritus inmundos, etcétera. No se deje cautivar por estas demostraciones excepcionales de poder. Consulte estos dos pasajes de su Biblia:

No todo el que me dice: Señor, Señor, entrará en el reino de los cielos, sino el que hace la voluntad de mi Padre que está en los cielos. Muchos me dirán? en aquel día. Señor, Señor, ¿no profetizamos en tu nombre, y en tu nombre echamos fuera demonios, y en tu nombre hicimos muchos milagros? Y entonces les declararé: Nunca os conocí; apartaos de mí hacedores de maldad.
Mate9 7:21-23

Porque ya está en acción el misterio de la iniquidad; sólo que hay quien al presente lo detiene, hasta que él a su vez sea quitado de en medio. Y entonces se manifestará aquel inicuo, a quien el Señor matará con el espíritu de su boca, y destruirá con el resplandor de su venida; inicuo cuyo advenimiento es por obra de Satanás, con gran poder y señales y prodigios mentirosos, y con todo engaño de iniquidad para los que se pierden, por cuanto no recibieron el amor de la verdad para ser salvos. Por esto Dios les envía un poder engañoso, para que crean la mentira, a fin de que sean condenados todos los que no creyeron a la verdad, sino que se complacieron en la injusticia.
2 Tesalonicenses 2:7-12

7. No se preocupe si en lugar de uno ve dos. Tenga presente que no será un solo gobernante, sino dos. Recuerde que la Biblia menciona que uno es el anticristo y el otro es el falso profeta, su ayudante:

Y el diablo que los engañaba fue lanzado en el lago de fuego y azufre, donde estaban la bestia y el falso profeta; y serán atormentados día y noche por los siglos de los siglos.
Apocalipsis 20:10

8. Si puede escapar de la espada del anticristo, hágalo. Si puede esconderse en algún lugar remoto y de difícil acceso hágalo, pero recuerde una cosa, el anticristo sabrá de su escondite. En Apocalipsis 13:15 dice que este personaje tan bestial levantará una gran imagen de sí mismo y hará que dicha imagen hable. Lo que sorprende es la clase de oratoria que tendrá la imagen. Delatará el escondite de los enemigos del anticristo.

Y se le permitió infundir aliento a la imagen de la bestia, para que la imagen hablase e hiciese matara todo el que no la adorase.
Apocalipsis 13:15

9. No se alarme si nota que los ángeles surcan el espacio evangelizando. Recuerde que durante ese terrible período, especialmente los últimos tres años y medio, muchísima gente se convertirá al Señor. Sea usted uno de ellos. No se asuste si oye predicar a 144.000 judíos y aun a los mismos ángeles que anunciarán el Evangelio, debido a lo cual muchos se convertirán recibiendo el perdón de Dios:

Vi volar por en medio del cielo a otro ángel, que tenía el evangelio eterno para predicarlo a los moradores de la tierra, a toda nación, tribu, lengua y pueblo, diciendo a gran voz: Temed a Dios, y dadle gloria, porque la hora de su juicio ha llegado; y adorad a aquel que hizo al cielo y la tierra, el mar y las fuentes de las aguas.
Apocalipsis 14:6-7

10. Si nota que muchos “ministros”e iglesias siguen como de costumbre, no se deje engañar El anticristo probablemente entregará una declaración, a través de su departamento de prensa, explicando lo del arrebatamiento. Dirá por ejemplo: “Dios permitió que seres extraterrestres vinieran en gran cantidad en naves espaciales invisibles llevándose de nuestro planeta a todos aquellos que no apoyaban la unidad, el ecumenismo, el globalismo. Ellos están ahora en un planeta desierto sometidos a una reprogramación a fin de que puedan regresar y formar parte de este gobierno ‘divino”’. Esta explicación hará que los que queden se sientan dichosos de no haber sido llevados a ese lugar tan árido, tan horrible, rodeados de seres grotescos y demoníacos.

11. No se alarme por los desastres que irán de mal en peor. Si usted sobrevive los primeros tres años y medio, es decir la mitad de la semana de Daniel, notará que luego habrá un verdadero desfile de desastres escalofriantes. No se desespere, pero tampoco espere que la gente, viendo cómo se cumple la Biblia, crean en Cristo y se arrepientan de sus pecados. Si bien es cierto que muchos se arrepentirán, la gran mayoría no lo hará, por eso en el libro de Apocalipsis se repite la frase:

Y no se arrepintieron de sus homicidios, ni de sus hechicerías, ni de su fornicación, ni de sus hurtos.
Apocalipsis 9:21

Habrá mucha hambre, guerras, blasfemias, demonismo, odio y manifestaciones en el cosmos nunca antes vistas. El oscurecimiento del sol, la caída de meteoros en cantidades increíbles, granizo de 30 kilogramos de peso y hambruna.

12. Si tuviera que ser llevado al cadalso anímese, el Señor le ayudará. Es casi seguro que usted tendrá que morir decapitado. De ser así, anímese y no claudique. Es preferible. La persecución contra los enemigos del anticristo será tal que se elevará una plegaria a Dios para que tome venganza de los perseguidores:

Cuando abrió el quinto sello, vi bajo el altar las almas de los que habían sido muertos por causa de la palabra de Dios y por el testimonio que tenían. Y clamaban a gran voz, diciendo: ¿Hasta cuándo, Señor, santo y verdadero, no juzgas y vengas nuestra sangre en los que moran en la tierra? Y se les dieron vestiduras blancas, y se les dijo que descansasen todavía un poco de tiempo, hasta que se completara el número de sus consiervos y sus hermanos, que también habían de ser muertos como ellos.
Apocalipsis 6:9-12

Y el pastor siguió su mensaje, pero Santiago había perdido el apetito y el sueño. Habían transcurrido ya varios meses desde que su familia y otros millones habían partido para estar con el Señor y durante ese tiempo Santiago sólo había comido lo más indispensable, los alimentos que había logrado comprar antes que se impusiera el micro-chip ya estaban agotándosele, muy pronto tendría que enfrentar la muerte en manos del anticristo, porque de rendirse quedaría irremediablemente condenado. Lucía demacrado, pálido y ojeroso y una profunda tristeza se plasmaba en su rostro. Había sido un buen esposo, tenía buen carácter. Nunca se opuso a que su esposa y sus hijos fuesen cristianos, pero creer en el arrebatamiento le parecía demasiado ingenuo. Además sabía que muchos “ministros” también se burlaban de esa doctrina.

Terminando el mensaje, el pastor agregó algo como si quisiera persuadir a esos que estaban destinados a quedarse para que no cometieran tal error: “Amigo, yo te invito a tomar esto en serio. Todavía la Iglesia de Cristo está aquí. Aún no ha sucedido el arrebatamiento. El anticristo no puede tomar el poder porque el Espíritu Santo, que habita en los cristianos se lo impide.

“Si en este momento usted se humilla delante de Dios, si confiesa sus pecados al Señor Jesús y le pide perdón, él será amplio en perdonarle y le dará vida eterna. Únicamente así estará seguro de que cuando llegue el arrebatamiento de la Iglesia usted tomará parte en esta gran operación traslado, cuando el Esposo, Jesucristo, finalmente al haber preparado el lugar vendrá en busca de su amada Esposa, la Iglesia, llevándosela a su presencia justo antes de los acontecimientos apocalípticos que estremecerán no sólo a nuestro planeta, sino a todo el universo.

“Recuerde: No espere alguna experiencia emocional, no es necesaria. Si la experimenta, está bien, pero no es un requisito para saber que es salvo. Todos los verdaderos hijos de Dios, los salvos, lo sabemos, no porque lo sentimos, sino porque el Señor nos aseguró que al recibirle como Salvador, en ese momento obtenemos vida eterna, así tengamos o no alguna experiencia estremecedora:

De cierto, de cierto os digo. El que oye mi palabra, y cree al que me envió, tiene vida eterna; y no vendrá a condenación, mas ha pasado de muerte a vida.
Juan 5:24

Mas a todos los que le recibieron, a los que creen en su nombre, les dio potestad de ser hechos hijos de Dios.
Juan 1:12

Así concluía la grabación, los últimos versículos pronunciados por el pastor parecían retumbar en el cerebro de Santiago. ¡Ya no podía más! El llanto le ahogaba y cayendo de rodillas elevó su corazón y su alma al cielo en una sentida oración, mientras lágrimas amargas surcaban su pálido rostro.

Y para usted amigo mío: ¡Por favor, no espere hasta que Dios recoja su Iglesia! ¡No se exponga a tanto peligro cuando puede evitarlo recibiendo hoy a Jesucristo como Señor y Salvador! ¡Por favor, hágalo ahora!