Albert Camus
- Fecha de publicación: Miércoles, 24 Septiembre 2008, 14:39 horas
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Albert Camus, quien nació en 1913 y murió en 1960, fue un autor francés, filósofo y periodista, a quien le fue otorgado el premio Nobel de literatura en 1957.
Fue un prominente pensador existencialista y luchó con asuntos religiosos, tal como el significado de la vida, la fundación para la moralidad, el problema del sufrimiento y el mal, y el deseo por vida eterna. Sus principales novelas - El extraño, que escribiera en 1942, La plaga en 1947 y La caída en 1956, exhibían su convicción de que Dios no existe y que el mundo no tiene significado alguno.
La principal frustración de Camus, se originó por el sufrimiento y el mal. Al ver el dolor y las aflicciones a su alrededor, no podía creer que Dios, quien era bueno y Todopoderoso, viera tales eventos y no hiciera nada por aliviarlos. Y sentía que no valía la pena creer en tal Dios.
Él simplemente no podía sentarse y observar el sufrimiento, de lo que sentía era un mundo sin significado. Por eso trató de crearle sentido, mostrando compasión por quienes padecían y animando a otros a hacer lo mismo.
Howard Mumma, un pastor metodista, era un ministro a quien invitaron durante varios veranos en la Iglesia Americana en París, a finales de la década de 1950. Durante esos veranos, Camus se acercó a él. El pastor Mumma, en ese tiempo había jurado guardar silencio, y sus conversaciones con Camus eran “irregulares y ocasionales”, pero tuvieron impacto. El ministro vio a un hombre que tenía preguntas y dudas respecto a sus convicciones, quien le dijo: “Estoy buscando algo que no tengo, algo de lo cual no estoy seguro y no puedo definir”. En lugar de tratar de señalar las fallas en la filosofía de Camus, Mumma se compadeció con él y expresó su propia incapacidad para entender el mundo, la existencia y propósito del hombre.
Conforme la conversación de ellos continuaba, Albert Camus comenzó a leer la Biblia que el pastor Mumma le había dado. Conforme la leía, algo se comenzó a activar en su proceso de pensamiento.
En una reunión posterior, Camus inesperadamente preguntó: “Howard, ¿bautiza usted?”. Y también le inquirió, cuál era el significado de experimentar el nuevo nacimiento, a lo que el pastor explicó que “el bautismo es un compromiso simbólico con Dios” y que nacer de nuevo “era entrar de nuevo u otra vez en el proceso de crecimiento espiritual... para recibir perdón porque le pidió a Dios que le perdonara sus pecados”. Camus replicó, “Howard, estoy listo. Yo quiero esto”.
Albert Camus deseaba un bautismo privado, pero el pastor no estuvo de acuerdo. A cambio le sugirió que continuara estudiando la Biblia y pospusiera su bautismo hasta que los dos pudieran ponerse de acuerdo respecto a la forma cómo harían esto. Ellos se despidieron, y Camus le dijo: “Mi amigo querido, gracias... ¡voy a mantenerme luchando por la Fe!”.
Unos pocos meses después, el 4 de enero de 1960, Camus murió en un accidente de automóvil.
Reflexión
¿Cree usted que Albert Camus está en el cielo? ¿Si usted hubiera sido Howard Mumma, habría hecho diferente cuando habló con él?
La Escritura dice: Pues está escrito: “Destruiré la sabiduría de los sabios, y desecharé el entendimiento de los entendidos. ¿Dónde está el sabio? ¿Dónde está el escriba? ¿Dónde está el disputador de este siglo? ¿No ha enloquecido Dios la sabiduría del mundo? Pues ya que en la sabiduría de Dios, el mundo no conoció a Dios mediante la sabiduría, agradó a Dios salvar a los creyentes por la locura de la predica