¡Resucitó!
Temprano el domingo por la mañana del día 5 de abril del año 30 ó 32 de nuestra era, María Magdalena y varias otras mujeres fueron a la tumba de Jesús. Para su gran sorpresa, encontraron que la piedra que cubría la entrada había sido removida. Al entrar en el sepulcro no hallaron su cuerpo, sólo los lienzos de lino con los cuales había sido amortajado y el sudario que cubría su cabeza, enrollado aparte. Ellas no podían comprender qué le había ocurrido al cuerpo del Señor.
Leer más ...